Es una palabra de origen japonés que significa tarjetas visuales. Mostrando permanentemente de modo visual el estado del proyecto de todos los implicados. Es un método muy útil para gestionar productos sometidos a un continuo y permanente cambio, así como para casos en que sea muy complicado planificar el trabajo, y para situaciones en las que no se pude determinar la duración de las distintas interacciones.
Gracias a este método se puede:
- Visualizar el flujo de todo el trabajo. En un panel organizado en columnas debe estar representado todo el flujo del trabajo, desde el principio hasta el final.
- Visualizar el estado de flujo de cada ítem en cada momento. La primera columna representa el backlog ( en inglés significa retrasos, nosotros lo traduciremos como «lo que queda por hacer») del producto,se pueden usas tantas columnas como estados sean necesarios
- Divide el trabajo en ítems pequeños, de forma que la carga de trabajo se puede repartir
- Limitar el trabajo en curso, de modo que se limita el número de ítems por cada columna, y así se evitan cuellos de botella.
- Mide el tiempo empleado en completar un ciclo completo. Calcula el tiempo que se tarda en realizar cada ítem.